Con respecto a la "reapertura del cine Diana" en el barrio Saladillo existen algunas cosas que no me quedan claras y que me molesta que no se las llamen por su nombre. El cine no es tal, el INCAA dono un proyector de pantalla gigante de DVD y VHS, lo cual significa que no es un cine, es solo una pantalla tipo Home Theater para ver DVD o videos. Las butacas no existen, son sillas de plástico para jardín, así que la tan repetida frase que los medios machacaron, usando la palabra “butacas” para remitirnos a una imagen de cine, es a todas luces falsa. Solo se recupero un edificio en muy mal estado al cual se le puso un poco de dinero y mucha propaganda, para que las caras de siempre aparecieran como sensibilizados por la recuperación de la cultura perdida.
¿Cine? ¿Butacas? ¿Reapertura?
Siguen jugando, y algunos se lo creen.
¿Cine? ¿Butacas? ¿Reapertura?
Siguen jugando, y algunos se lo creen.